El hierro en los alimentos

El hierro o fĕrrum, en latín, es un elemento químico (Fe) y es muy abundante en nuestro planeta. Como ya sabéis, fue un material muy usado por el ser humano, fue tan importante que incluso a una época histórica se le llamó la Edad de Hierro (desde el siglo XII a.C. hasta el siglo VI a.C.).
Además de ser un material técnico (aleaciones férricas) es un mineral que tomamos en nuestra alimentación (de 10 a 30 mg diarios, en adultos), ya que es imprescindible para algunas funciones. La falta de hierro en la sangre provoca anemia.
Podemos encontrar hierro en una gran variedad de alimentos: hígado, carnes rojas, pollo, riñón, morcilla, pescado, huevos, mejillones, cereales y legumbres.
A quién no le ha dicho su madre alguna vez: cómete las lentejas, que tienen mucho hierro. Pues es cierto.
Pero ahora nos vamos a centrar en los cereales, los cereales del desayuno, que, además de contener hierro de forma natural, también lo enriquecen con este mineral.
En el siguiente vídeo, que ya vimos en clase, extraen el hierro de una bolsa de cereales.